Cuanto ruido hay en el ambiente. Todos están lanzados a presentarse como los mejores del colegio, pero claro, la “gestión mata el relato” y lo mata bien muerto.

El principal proponente es el Gobernador Gustavo Sáenz, todo gobernador tiende a querer repetir su gestión. ¡Dios nos libre! Pero bueno, no tiene muchas medallas en el pecho el caballero. Lo que si tiene es guita.

 

En el corto plazo podemos decir que se olvidó de todas las promesas al entrar a la Finca Las Costas. La reforma de la constitución no solo fue inoportuna, en medio de un brote de la pandemia, sino que fue inconducente, ya que él mismo se privó de limitar sus períodos de mandato. Como está la reforma él podría estar 3 períodos, entonces sus promesas fueron letra muerta.

 

No quiero recorrer la secuencia de incorrecciones de gobierno para no entristecernos más. Seré breve. Con la pandemia comenzó subestimándola y terminó con salteñas y salteños sin tener donde internarse. Muriendo en sus casas o en las ambulancias. Lo confesó al aire. Los wichis se siguieron muriendo, a pesar de sus últimas palabras “sacha” macristas (mortalidad cero)

 

Los bolsones no llegaron, los comedores siguen sin estar abastecidos y los niños pasan hambre en esta rica provincia. Los anuncios de obra pública abundan, pero el agua no apareció, no en diciembre 2022, sino que no apareció nunca. Solo podemos contar el agua que distribuyó el Ejército Argentino.

 

La luz se fue como un rayo entre las nubes, y tenemos que suponer que fue con su propia autorización ENTE mediante.

 

Promueven una ruta que viene a superponerse con una autopista en el norte salteño, cuando hay rutas intransitables en toda la provincia. Ayer nomás se “quedó” una camioneta de Salud con una embarazada en La Puntana.

 

Y así podemos terminar con el ridículo, pero coherente con su pensamiento, Decreto 91/23 que le dice a su Ministro que haga respetar las leyes (SIC), que autoriza lo ya autorizado. ¿Se acuerdan cuando gritaba “Hay que sacar el Ej{ercito a las calles”? Bueno, se está dando el gusto pero no puede.

 

A su derecha se encuentran Nanni ¿Qué decir? La falta de peso específico es notoria. Su coqueteo con los sectores más derechosos de Salta, dentro del macrismo, no hacen honor al Partido de Alem e Irigoyen.

 

Entre esta derecha (valga la aclaración que estas categorías ya están caducas, y sirven solo como para acercarlas o alejarlas del neoliberalismo) y la derecha del gobierno se metió Avancemos. Zapata/Olmedo/Biella parecían una yunta posible, pero claro, se sentían huérfanos y salieron a buscar la pata financiera. La Revolución del Comercio, aquella que pretendió voltear al héroe M.M. de Güemes, esa que unió a los hacendados y comerciantes se recrea con el poder financiero de la mano de Estrada. Todos contra el pueblo.

 

Más a la derecha está el partido de Milei, ahora sindicado de vendedor de favores por sexo y dinero. Su candidato aun no lo tenemos muy presente, pero sus pintadas están.

 

Del otro lado aparece una propuesta popular incipiente aún. Un grupo que pretende reunir en igualdad de condiciones a las diferentes agrupaciones más justicialistas, progresistas dirán algunos, populistas dirán otros.

 

Salta para Vivir Bien aparece sin un liderazgo clavado en los carteles porque se viene construyendo en paralelo en toda la provincia. Es una propuesta para los trabajadores formales e informales, con gremios y sindicatos, con movimientos que no se asocian a quienes explotan a sus defendidos. Para los empresarios que generan puestos de trabajo a la vez que ganancias.

 

Salta para Vivir Bien presentará un Plan de Gobierno surgido desde las bases consultadas, desde los Barrios Populares, las Comunidades Originarias, las bases obreras, con visión anticolonialista, soberana y productiva.

 

No especulemos más, demos un vuelco en la provincia.