La Perla que acabó con el sueño de los trabajadores

¡Mirá que he visto cosas raras en no sé cuántas elecciones de la que he participado!!! Pero esta que se dio en la previa de las elecciones legislativas provinciales del 11 de mayo próximo, superó cualquier capacidad de asombro que podamos imaginar.

 

Antes de ser oficializada las listas de candidatos, el tribunal electoral de la provincia, eliminó del calendario electoral de los comicios de mayo, al partido del CET (CULTURA, EDUCACIÓN Y TRABAJO).

 

El CET, es el partido que había formado el sindicato de camioneros y dentro del cual los dirigentes de las 62 Organizaciones Sindicales Peronistas de Salta, habían puesto todas sus esperanzas de participar, activamente, como punta de lanza del movimiento obrero, para acceder a las distintas bancas en juego, este año, tanto a nivel de la legislatura provincial como municipales.

 

El titular de las 62, brazo político de la CGT local, José “Papalardo” López, al dar su primer mensaje como su nuevo conductor, que uno de sus objetivos era recuperar el espacio que le corresponde al movimiento obrero, en el PJ.

 

Da la casualidad que días después, el PJ local es intervenido por la PJ nacional, conducido por Cristina Fernández de Kirchner.

 

Se cumplieron los pasos programados de buscar la participación del movimiento obrero dentro de recientemente intervenido partido. Los principales referentes de las 62 organizaciones sindicales peronistas de Salta, hicieron un avance dialogando con el interventor. Sergio Berni, con la esperanza de poder acordar y lograr un espacio en el Frente que llevaba al PJ, con vista a armar una lista de consenso y competir con alguna expectativa en las elecciones. Pero parece que hubo cierto cortocircuito, cuando el encargado del armado de las alianzas y por ende de los candidatos y lugares en la lista, era nada más y nada menos que el diputado nacional, Emiliano Estrada.

 

Esa fue la perlita que pudrió todo, para la dirigencia gremial, y de una se retiraron de la mesa de negociaciones.

 

Entonces, algo que ya se había conversado durante la elección de las autoridades de las 62, la dirigencia de los trabajadores optó por ir a las elecciones independientemente, a través del partido de los camiones, el CET, y ahí se conchabaron y se inscribieron en la juta electoral con candidatos en todos los departamentos.

 

El candidato a Senador por Capital del CET, se inscribió al titular del gremio de camioneros, Jorge “Pirulero” Guaymás, y como primer candidato a Diputado, también por capital, el dirigente de los trabajadores farmacéuticos José “Papalardo” López.

 

Todo había salido como lo habían pensado los muchachos. Pero lo que no contaron con la astucia del Tribunal electoral, quien a pocas horas de presentadas las listas de candidatos de la provincia, decidió sacarle la tarjeta roja y de esa manera sacó de la cancha electoral de los candidatos de los trabajadores.

 

Y usted mi estimado amigo, se preguntará por qué pasó eso. Sencillo.

 

Por no presentar los papeles como corresponde, como agrupación política, y candidatos flojos de papeles y otros sin la correspondiente aceptación de la candidatura al cargo a disputar.

 

Nadie entendía nada de nada. Pero la verdad que nadie puede entender que dirigentes de tanta trayectoria y experiencia con varias elecciones encima, pueda dejar pasar semejante falta de papeles.

 

Como dice el mismo Guaymás, esto parece una inconcebible torpeza que llevó a que algunos pensaran que algo raro pasó con la presentación de lista de los candidatos del CET.

 

Desde ya que en principio se le achacó discrecionalidad y “mala leche”, al Tribunal Electoral. Pero los más piensan que los papeles no estaban en regla y que la culpa es de los mismos apoderados del Partido de los camioneros que no supieron mirar que todo estaba en regla como para competir, y por primera vez solos como organización obrera, solos en una elección.

 

Seguro que, ya es motivo de análisis, cuando no de algunos reproches por este tropiezo que tuvieron los que se prometieron dar batalla por los derechos de los trabajadores, en la legislatura provincial.

 

Algunos dirigentes gremiales expresaron su desazón por no poder contar con un espacio propio para llegar a los cuerpos deliberativos de la provincia y municipios

Pero, la verdad que  por pasarse de “rosca” se quedaron sin el pan y sin la torta.